La clave en la calidad del melón de exportación

La producción mundial de melones ha aumentado considerablemente en los últimos 10 años, pasando de 20 millones de toneladas en 2010 a 28,5 millones en 2020, según datos de la FAO (procedentes de la base de datos FAOSTAT). El área que más melones produce es Asia, seguida de América, Europa, África y Oceanía.

En 2020 se batió el récord en la producción mundial de melón. La superficie que en ese año se dedicó a producir melón fue de 1.068.238 hectáreas, con un rendimiento medio por metro cuadrado de 2.66 kilos de melón.

Si comparamos la evolución de los últimos 20 años, se puede observar como el peso de China y de los países asiáticos ha ido en aumento, desplazando a España y a los países productores mediterráneos o americanos de los primeros puestos que ocupaban en décadas pasadas.

El ranking de países productores de melón en 2020 fue: China, con 13,8 millones de toneladas; Turquía, con 1,7 millones, India, con 1,3 millones, Irán, con 1,3 millones, Kazajstán, con 1,2 millones, Afganistán, con 793.496 toneladas, Estados Unidos, con 696.093 toneladas, Guatemala, con 655.712 toneladas y Brasil, en décimo lugar, con 613.933 toneladas.

Sin embargo, el cultivo del melón sigue siendo muy importante en varios puntos de América como México (612.940 toneladas en 2020) o en distintos países de Centroamérica, como Costa Rica -78.726 toneladas en 2020- u Honduras -308.788 en 2020.

Los principales países exportadores de melón

Y es que algunos de estos países están entre los principales exportadores de melón. El primero es España, con 435.708 toneladas en 2020; le sigue Guatemala, con 341.428 toneladas; en tercer lugar está Brasil, con 236.259 toneladas, seguido de Honduras, con 222.911, los Países Bajos, con 151.717, Estados unidos (142.816), México, con 106.368 toneladas, Costa Rica, con 84.711 toneladas y China, que pese a ser el principal productor del mundo desde hace ya algunos años, ocupa el décimo lugar como país exportador (con 84.526 toneladas), lo que indica que gran parte de su producción se destina al consumo interno.

Con estas cifras en la mano la primera conclusión a la que llegamos es que, a diferencia de lo que sucede en muchos países asiáticos, gran parte de la producción de España y de los países centroamericanos se destina a la exportación hacia destinaciones como Estados Unidos, Canadá o Europa.

El melón de exportación: firmeza y calidad postcosecha

Estos viajes conllevan un aumento de los requisitos que debe cumplir el melón de exportación, cuyas exigencias de calidad suelen ser más elevadas que las que tiene que cumplir una pieza destinada a un consumo interno e inmediato.

Bajo estas circunstancias es cuando cobra sentido apostar por extender al máximo la vida poscosecha de esta fruta tan popular sin renunciar al mantenimiento de una calidad óptima. Más concretamente, nos referimos a parámetros claves como la firmeza, la calidad interna y externa del fruto, la ausencia/presencia de manchas, la pérdida de peso en poscosecha o las alternaciones fúngicas, unos valores que incidirán claramente en la viabilidad de exportación de una pieza.

Estos parámetros están directa o indirectamente relacionados con el calcio, uno de los nutrientes más importantes para los cultivos. Está amplia¬mente demostrado que el calcio tiene un efecto imprescindible en la formación y posterior estabilidad de las membranas y paredes celulares; en el crecimiento y división celular; en la mejora de la asimilación de nutrientes y en la floculación de suelos (evitando su compactación).

Sin embargo, existe un gran problema que dificulta la eficacia de los tratamientos: el calcio es un elemento que tiene muy poca movilidad, y se transporta de forma muy deficiente de un lugar a otro de la planta.

Para asegurar que una estrategia de calcio resulte eficaz para el cultivo es imprescindible aplicar un tratamiento que proporcione calcio disponible, que desbloquee el calcio del suelo y que mejore la asimilación y transporte de calcio dentro de la planta. Sólo de esta forma se asegurará que el calcio penetra en el cultivo y realiza la función de alargar la vida útil del fruto tras su recolección -lo que resulta imprescindible en el melón de exportación.

La estrategia manvert para el melón de exportación

La estrategia manvert consiste en la combinación de dos productos de aplicación radicular: por una parte, manvert win-Ca, que aporta calcio disponible y de asimilación inmediata, además de desbloquear calcio fijado en el suelo, y, por otra parte, el bioestimulante manvert movili-Ca, que es un movilizador de calcio hacia el interior de la planta, un efecto que se consigue gracias a la incorporación de una molécula orgánica denominada PACaR, que activa el calcio y le dota de movilidad.

Varios ensayos realizados en Costa Rica y en México han demostrado la eficacia de este tratamiento de calcio, con el que se logran excelentes resultados tanto en cosecha (aumento de los frutos amarrados y de la producción y aumento de la calidad interna y externa) como en poscosecha (aumento de la calidad interna y externa, disminución de la presencia de manchas en la superficie del fruto, disminución de la pérdida de peso y de alteraciones fúngicas).

A continuación presentamos algunos de los resultados de un reciente ensayo realizado en México en 2020 en plantas de melón cantaloupe variedad Honey. Con 3 aplicaciones de la estrategia de calcio manvert se lograron resultados altamente satisfactorios en las evaluaciones en cosecha y en poscosecha (a los 15 y 27 días después de la cosecha a 7ºC).

• Disminución de la presencia de manchas en la superficie del fruto tras 27 días

Con estos resultados se demuestra la eficacia de manvert movili-Ca y manvert Win-Ca para lograr un aprovechamiento máximo del calcio en el cultivo de melón de exportación, lo que se transforma en una garantía de ampliación de la vida poscosecha de la pieza para que llegue a su destino final en óptimas condiciones.